10 octubre 2006

Matar la gallina de los huevos de oro

Paco Morán y Joan Pera llevan más de una década siendo una extraña pareja en los escenarios de toda España. La fórmula funciona a la perfección cuando al tándem de actores se suma un público entregado y entusiasta. Villena no fue una excepción: el Teatro Chapí rió sin parar con "Matar al presidente".

Son doce años de ininterrumpido éxito, cuatro obras distintas que han arrasado allá donde han ido y que han alcanzado extraños logros en el mundo del teatro: record guinnes de venta de entradas y 16.500 espectadores en el Palau Sant Jordi el día que despidieron “La extraña pareja”, su primer espectáculo. Con semejantes registros algo deben de tener los montajes de la productora Focus para arrasar de esa manera. Algo que, ya les adelanto, a mí me resulta difícil de compartir y menos en esta ocasión.

Normalmente dos pilares sustentan las tres paredes del teatro: argumento e interpretación. En principio ambos valores estaban garantizados en “Matar al presidente”: el texto corresponde a Francis Veber, reputado comediógrafo responsable de aquella memorable “La cena de los idiotas”, y la interpretación de Morán y Pera se intuye perfecta después de tanto tiempo. Pero lo cierto es que ni lo uno ni lo otro.

El guión de Veber es sencillo y lineal, muy alejado de la crueldad sarcástica de “La cena de los idiotas”. Fíjense si es flojo que Billy Wilder sólo pudo hacer con él una película normalita, llamada “Aquí un amigo”, que tristemente fue la última. Además el embrollo versiona el argumento del “Chacal” de Frederick Forsyth, por lo que ya tenemos pistas de cómo se resolverá el asunto, y se sirve aderezado con un prescindible lío de faldas que contribuye a alargar en exceso la duración de la obra.

De esta manera el texto es una anécdota argumental al servicio de los actores, que se sienten crecidos y estiran sus personajes a lo largo de las dos partes del espectáculo. El primero que surge en la extraña escenografía (decorado de los cincuenta en el que cabe una radio digital) es Paco Morán, seguido de un botones que le pide la maleta. El veterano actor responde “no” y ahí llega el prodigio: el patio de butacas estalla de risas para nunca volver a parar. Durante dos horas no cesó el jolgorio de mis acompañantes y aquello fue común en un Teatro Chapí que se llenó hasta las butacas más altas.

Pero el acabose llegó con Joan Pera. Quizás porque su voz es relativamente conocida, no en vano dobla al castellano a Woody Allen y a Rowan Atkinson, Joan se inventa un personaje de ademanes excesivos, maneras blandas y giros lingüísticos en catalán que entusiasmaron al público, pero que para mí se situaban a un paso del ridículo o más cerca de una imitación de Eduard Punset.

Así que a las tres paredes del teatro siempre hay que sumarle una cuarta, la fundamental: el público, y por ello hay que rendirse ante dos actores que de nuevo a las órdenes de Ángel Alonso son capaces de levantar un teatro entero aunque sea reiterando gritos, posturas y gracietas.

Mientras la fórmula funcione y el cuerpo aguante parece que la van a seguir explotando y lo cierto es que la gente, casi toda, se lo pasa muy bien. Aún así lo deseable es que en algún momento también se atrevieran con otro tipo de registros o incluso si quieren continuar en su labor de rescate de pasadas comedias se animen también con Jardiel Poncela o Miguel Mihura, que falta hace.

Todo ello teniendo también en cuenta que la programación periódica de este tipo de entretenimientos (“La jaula de las locas” se representó en el Chapí en 2002), que consiguen llenar teatros y fomentan aficiones, son poco menos que una obligación en programaciones generalistas. Lo digo porque nunca me ha parecido bien ese ánimo de matar al mensajerovodeviles como el del sábado y alguna cosa de mayor enjundia.

que trae el espectáculo. Eso sí, siempre que el resultado final guarde un equilibrio entre Si te gustó "Matar al presidente" también te gustará:

  • "L’Emmerdeur" – Edouard Molinaro (1973)
  • "Buddy, buddy" (Aquí, un amigo) - Billy Wilder (1981)
  • "La cena de los idiotas" – Francis Veber (1997)
  • 1 comentario:

    Enrique Gallud Jardiel dijo...

    Muchas gracias por su referencia a mi abuelo.